miércoles, 24 de marzo de 2010

Porque sé que te hace falta

"Muchos quizás no entendáis el significado de este post, pero la única misión es sacar una sonrisa de una carita que sé que está pasando por uno de los momentos más duros por el que una madre puede pasar. Estas líneas se las escribí la noche antes de su boda y sé que le va a hacer bien recordarlas. Te quiero nena, sabes que todo va a ir bien sólo tienes que ser fuerte."


Las Torres de Cotillas, 18 de Octubre de 2008

Queridos Elena y Paco,

Ha llegado vuestro gran día, parece que fue ayer cuando estaba viendo una peli y sonó el teléfono y yo pensaba que era para que me bajara a tomarme una copa con vosotros y míranos donde estamos hoy, y como seguramente estaréis muy atareados y, si os soy sincera, no tengo valor para deciros todo esto porque me azoro y me emociono, pues he decidido que mejor os escribo.

Hace ya unos años que os conozco, a Paco un poco más que a ti Elena, y si os soy sincera jamás creí que nos fuéramos a unir tanto y mucho menos con todo lo que han ido cambiado nuestras vidas. No tengo palabras suficientes para agradecer el que me hayáis apoyado en todo momento incondicionalmente, todo lo que me habéis mimado y cómo me habéis comprendido y sobre todo los problemas que más de una vez os habré causado por estar siempre a mi lado. Dicen que los amigos los cuentas con los dedos de las manos así que con vosotros solo me quedan ocho.

No todo va a ser recordar momentos difíciles o menos bonitos, también me acuerdo de los viajes que hemos hecho juntos, aquella primera casa rural que más que una casa rural parecía que le teníamos que decir a nuestras madres que nos íbamos de cooperantes a Afganistán …¡y eso que les dijimos que dormíamos chicas con chicas! Los botelleos en el Palacio de los Deportes… ¡anda que si las grabaciones de las cámaras de seguridad salieran a la luz! Y así fueron pasando los años y entre veranos yendo a la playa y de fiestas variadas e inviernos de cine y diván, mis viajes a Inglaterra, alguna nochevieja pasada por agua que otra y semanas santas etílicas… ya son casi nueve años…

Si miro al futuro, me dais envidia, envidia porque que estáis hechos el uno para el otro y vais a ser un matrimonio feliz y eso en estos tiempos de locura es muy difícil. Según dice Tolstói "El matrimonio es una barca que lleva a dos personas por un mar tormentoso; si uno de los dos hace algún movimiento brusco, la barca se hunde.", supongo que tendréis momentos duros (que espero sean los menos), pero seguro que si os respetáis y os amáis, como me consta que lo hacéis ahora, sabréis salvar y equilibrar la barca; tenéis muy buenos ejemplos a seguir en vuestras familias y sé que sabréis valorar el matrimonio por lo que realmente significa y si alguna vez necesitáis reconstruir la barca no olvidéis los orígenes de todo ese amor que os ha traído a dar este paso hoy y qué fue lo que os llevo a enamoraros.

Espero veros felices siempre y que me dejéis seguir formando parte de vuestras vidas porque no encuentro las palabras para expresaros lo mucho que os quiero y os aprecio. Sólo deciros que aunque las circunstancias nos separasen en el futuro o cada vez nos cueste meses el volvernos a ver, siempre os llevo conmigo y a mi Pakito y a mi Elena que no me los toque nadie (¡Qué pava soy que ya estoy llorando!), que las puertas de mi casa (si alguna vez la tengo) estarán abiertas para vosotros cada vez que llaméis a ellas, que no os puedo decir que las de mi corazón también lo están porque hace mucho tiempo que os ganasteis ese trozo de mi y que aunque todo esto quede cursi, así soy yo de tonta ¡qué le vamos a hacer!

Muchísimas felicidades,

Victoria

2 comentarios:

Blanca dijo...

Si, mucho ánimo.

P.D. Me gusta como escribes...

victoria,victoriae dijo...

Muchas gracias Blanca, me anima saber que poco a poco la gente me va leyendo y que gusto a algunos...Saludos